Una respuesta inmune es un conjunto de procesos desarrollados que forman parte del mecanismo de defensa del cuerpo, esta respuesta inmune se da por parte del sistema inmune y protege el organismo de agentes externos o agentes patógenos de procedentes de virus o bacterias y por lo tanto dañinas para el cuerpo.
Existen diferentes tipos de respuesta inmune dependiendo de la capacidad de respuesta por parte del sistema inmune:
- La inmunidad innata este tipo de respuesta inmune está caracterizada por ser la primera respuesta por parte del sistema y es adquirida desde el nacimiento y protege el organismo de diferentes antígenos. Se llama así porque no necesita del aprendizaje que se obtiene tras entrar en contacto con un invasor. Esta respuesta inmune innata se puede presentar de diferentes formas, puede ser el reflejo de la tos, las enzimas ubicadas en las lágrimas, el moco que tiene como función atrapar bacterias en las fosas nasales, la piel o el ácido gástrico que ayuda a digerir los alimentos.
- La inmunidad adaptativa es un tipo de inmunidad desarrollada por parte del sistema inmunológico que se produce cuando el organismo detecta la presencia de un patógeno, independientemente de si es un virus o una bacteria, este tipo de respuesta inmune es uno de los tipos de respuestas inmunes desarrolladas por parte del sistema inmunológico para proteger el organismo, se trata de un tipo de respuesta inmune más lenta pero específica y dirigida, en este caso, participan las células inmunitarias y anticuerpos, se tratan de células especializadas que atacan los antígenos que amenazan la salud del organismo. Otra de las características de este tipo de respuesta inmune es su durabilidad, es una respuesta inmune que dura semanas, meses o un largo periodo de tiempo.
Los diferentes tipos de respuesta inmune son esenciales para mantener el cuerpo y el organismo alejado de bacterias y virus que en algún momento puedan comprometer la salud, por esta misma razón, es esencial reforzar el sistema inmunológico.
Consejos para reforzar el sistema inmunológico
- Alimentación equilibrada: consumir alimentos ricos en vitamina D, las frutas y verduras resultan una gran fuente de vitamina D para el organismo, aguacate, zumo de naranja o el plátano aportarán una buena dosis de vitamina D.
- Ejercicios para fortalecer el sistema inmune: incluir en nuestra rutina ejercicios físicos moderados pueden influir de forma efectiva en el sistema inmune ya que pueden prevenir infecciones respiratorias, incluir una caminata o practicar ciclismo son dos buenos consejos para reforzar el sistema inmunológico.
- Incluir vitaminas y minerales en la dieta, existen situaciones como el estrés, una época de mayor volumen de trabajo o cualquier enfermedad pueden suponer una situación agotadora para nuestro organismo y que se resientan las defensas, las vitaminas y minerales incluidas en la gama Redoxon® suponen una excelente opción para fortalecer el sistema inmune y reforzar las defensas ante este tipo de situaciones que pueden poner en riesgo al organismo.
- Descanso adecuado: dormir bien y la cantidad de horas adecuada ayuda a regular el sistema inmune ya que refuerza los diferentes tipos de respuesta inmune y ayuda en la prevención de agentes externos que amenazan la salud del organismo.
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